domingo, 31 de enero de 2010

Otros Autores: Javier Araguz


Siguiendo con mi presentación de otros autores que aún no son reconocidos por el gran público, os traigo hoy mi charla con Javier Araguz. El autor de "El mundo de Komori" viene a Parrafos Perturbados para contarnos unas cuantas cosas sobre sus experiencias, sus proyectos y sus sueños. Si aún no habíais oído hablar de él, no dejéis pasar la oportunidad y descubrir un escritor interesante.



1. Cuando pensaste en publicar por primera vez, ¿qué te motivó a hacerlo?
Escribí mi primera novela sin intención de publicarla. En realidad se trataba de un regalo para mi novia, que es una gran lectora, y una especie de prueba autoimpuesta para comprobar que podía escribir algo más que guiones cinematográficos. La motivación vino después, cuando mi pareja dijo que era "lo más imaginativo que había leído desde 'La historia interminable'" y me animó a publicarlo.

2. ¿Cómo ha sido hasta ahora tu experiencia en el mundo editorial?
Agridulce. Uno espera que su editorial se desviva por promocionar su libro, pero, desgraciadamente, tu obra tiene que compartir recursos con otros libros de la misma editorial. Para mí, estos últimos tres años han sido un curso acelerado de cómo funciona la industria literaria.

3. ¿Dónde buscas la inspiración para tus obras?
En cualquier sitio. Siempre llevo una libreta encima, donde apunto toda clase de ideas. Aunque, si te soy sincero, leer mucho (tanto literatura como cómics) y ver mucho cine ayuda bastante. Con el tiempo, uno aprende a distinguir estructuras y a seleccionar buenas y malas ideas.

4. ¿Cuál es tu medio favorito? ¿El relato o la novela?
Sin lugar a dudas: la novela. Me gusta mucho desarrollar las historias y mostrar cómo crecen los personajes. Siempre intento añadir todo tipo de detalles y subtramas, así que practicar el relato corto, aunque lo haya hecho y me parezca una experiencia interesante, siempre se me hará más difícil.

5. ¿Cuánto te han influenciado tus estudios y/o tu profesión a la hora de escribir?
Siempre he estado involucrado con el audiovisual. El cine, los cómics, la ilustración y el diseño gráfico han sido y siguen siendo una parte muy importante de mi vida, así que a la hora de escribir soy muy visual.

6. Te proponen una novela histórica, ¿en qué momento y lugar la ubicarías?
Siempre he sentido especial predilección por la época victoriana. Fue una era oscura en la que la ciencia empezaba a responder a grandes interrogantes y en la que todo parecía posible. Aunque, como siempre intento jugar con la imaginación, supongo que le añadiría una pizca de steampunk o tendería a la ucronía.

7. ¿Tienes alguna rutina diaria para escribir o te dejas llevar?
Cada día dedico, como mínimo, ocho horas. Me lo tomo como si de un trabajo de oficina se tratara. Aunque no todo es escribir: antes hay que organizar ideas, armar una estructura coherente, desarrollar arcos argumentales, tramas, subtramas, apuntar diálogos, definir personajes... Esto puede parecer algo tedioso, pero es una parte importante del proceso. Hay días en los que uno no avanza ni una línea y otros en los que ha desarrollado el borrador de un libro entero. El provecho que se le saque a todas esas horas depende de muchos factores. Hay que ser muy disciplinado, sino, se corre el riesgo de perder el norte.

8. ¿Hay algún manuscrito que guardes en un cajón porque aún no lo consideres suficientemente bueno?
Manuscrito no, he tenido la suerte de poder publicar todo lo que he escrito. Lo que sí tengo guardado es algún que otro proyecto, esperando a que madure tanto la idea como mi destreza narrativa. También cuento con un par de guiones que quiero reescribir e incluso adaptar a novela. Por suerte, ¡ideas no me faltan!

9. Algo que puedas contar sobre tu último proyecto literario...
En estos momentos estoy trabajando en tres proyectos: el primero es la tercera y última parte de la saga de "El mundo de Komori", que se titulará "La Guerra de los Vientos" y que me encuentro ultimando en estos momentos para que pueda ver la luz el próximo abril. El segundo es un libro escrito a cuatro manos con Isabel Hierro llamado "La Estrella", que, tras quedar finalista del "I Premio de Literatura Juvenil As de Picas", le estamos dando un último repaso. El tercero es un experimento literario que quiero llevar a cabo conjuntamente con otros autores. Es algo así como una antología de relatos de la que, espero, salgan cosas muy interesantes.

10. ¿Qué libro rescatarías a toda costa de tu biblioteca?
No soy persona de un solo libro, pero "La princesa prometida", de William Goldman, me dio todo lo que necesitaba en el momento que lo necesitaba.

11. ¿La última novela que has leído y recomendarías?
Una de las últimas novelas que he leído y recomendaría es "El mapa del tiempo" de Félix J. Palma. Es una lectura muy original y entretenida.

12. ¿Con qué personaje literario te identificarías?
Probablemente con Don Quijote, porque siempre me dicen que vivo en mi mundo y fantaseo con cualquier cosa. Soy de los que creen que no hay nada imposible.

13. ¿Permitirías que adaptasen alguna de tus obras al cine?
Antes de publicar mi primera novela ya había hecho mis pinitos en el cine. Escribí varios guiones, rodé algún que otro corto, colaboré en varios proyectos, así que uno de mis objetivos siempre ha sido llevar yo mismo las novelas a la gran pantalla. Y en ello estoy.

14. Aparte de escribir, ¿practicas alguna otra disciplina artística?
Como ya he comentado antes, soy un apasionado del séptimo arte y pretendo dirigir en breve mi primer largometraje. Asimismo, me he dedicado al diseño gráfico y la ilustración durante algún tiempo.

15. ¿Qué te falta por hacer ¿Plantar un árbol? ¿Tener un hijo?
Dirigir una peli, publicar un cómic, aprender a tocar el piano, desenvolverme perfectamente con el inglés, tener un par de hijos... soy un culo inquieto. ¡Aún me quedan muchas cosas por hacer!

jueves, 28 de enero de 2010

¿Has escrito a Viggo Mortensen?


No he estado muy ágil (ni muy inspirado), así que la noticia llega tarde para quien no haya oído de la convocatoria en foros de literatura. De todas formas, me parece tan interesante que quiero hacerme eco de ello.

Ha sido a través de la página digital de El Mundo. A raíz del próximo estreno de la versión cinematográfica de "La carretera" de Cormac McCarthy, propusieron a sus lectores que enviasen un relato de mil caracteres. En él, debían plasmar su propia teoría respecto a las causas del Apocalipsis que ha azotado la Tierra en la novela. Lamentablemente, el plazo acabó ayer y los ganadores van a ser proclamados de forma privada, así que no creo que se pueda comparar la calidad de los relatos presentados.


¿Alguno supo del concurso? ¿Habéis participado? ¿Cuál fue vuestra propuesta? Mi opción era un desastre natural mundial provocado por alguna nueva tecnología para la extracción de energía del planeta. Sin embargo, no encontré ninguna base científica (sí, quería que fuese científicamente plausible) y acabé por abandonar.

Personalmente, creo que la iniciativa es bastante interesante. Porque, aunque es cierto que el "por qué" del desastre resulta irrelevante para la historia, creo que todos los lectores de "La carretera" nos quedamos con las ganas de saber cómo se produjo el desastre (aunque quizá parte de la gracia del misterio consista en las preguntas que nos hacemos sobre lo ocurrido).

Espero vuestras respuestas y comentarios.

EDITADO (03/02/10)
Los ganadores del concurso ya han sido dados a conocer.

viernes, 15 de enero de 2010

Otros autores: Esteban González


Empezamos el 2010 y toca volver a leer las respuestas de un futuro autor de relumbrón. Hoy le dejamos sitio en el escenario a Esteban González, responsable del blog "El buen pozo sediento" y otro cuentista de pro con el que he coincidido (y "cruzado espadas" literarias) en algunos foros del mundo virtual. Además, y desde hace poco tiempo, es el orgulloso autor de una novela juvenil, "Fugaces".




Sobre todo, recomiendo la lectura de su blog como una manera de descubrir tesoros de autores noveles entre las reseñas de escritores archiconocidos. Además de una crítica franca de lo que lee, no se detiene en demasiadas florituras a la hora de dar su opinión sobre la obra.

¿Quieren saber más cosas sobre él? Ahí vamos.

1. Cuando pensaste en publicar por primera vez, ¿Qué te motivó a hacerlo?
En el fondo, todos los que escribimos tenemos el deseo de publicar, antes o después. Ver tu obra en letras de molde y encuadernada es muy emocionante, y más emocionante aún es poder ofrecérsela a los demás, cuando ya está definitivamente acabada. Es una mezcla de orgullo y vanidad, aunque algunos tenemos que vencer nuestro pudor para poder mostrar lo que escribimos.

2. ¿Cómo ha sido hasta ahora tu experiencia en el mundo editorial?
Hasta ahora inexistente, jeje. Viendo las dificultades de otros escritores noveles, yo he optado por la publicación bajo demanda en Internet de una novelita juvenil sin muchas pretensiones: Fugaces. Es sencillo, barato y accesible desde cualquier lugar del mundo. Además la relación calidad-precio es excelente. Más delante, si consigo completar otras novelas, intentaré la publicación convencional. Ya veremos.

3. ¿Dónde buscas la inspiración para tus obras?
En realidad no la busco, me busca ella a mí. Cuanto más ocupado estoy, más ideas se me ocurren para escribir. Creo que mis musas beben de las películas de aventuras que veía de pequeño, de los dibujos animados (ese Mazinger Z…), de las interminables horas de juego con los Cliks de Playmobil, de los libros de aventuras y fantasía (Salgari, Karl May, Ende, Tolkien, Twain, Doyle, Robert E. Howard…).

4. ¿Cuál es tu medio favorito? ¿El relato o la novela?
La novela, por descontado. Tanto para leer como para escribir. Lo que ocurre es que los relatos les puedes acabar en un par de días y las novelas en un par de años, con lo que en el tiempo que escribes una novela te da para escribir unos cuantos relatos. Yo, en particular, utilizo los relatos como campo de pruebas; ensayo narradores, temas, enfoques... Y luego lo aplico a mis novelas.

5. ¿Cuánto te han influenciado tus estudios y /o tu profesión a la hora de escribir?
Tal vez mucho. Estudié una carrera técnica, una ingeniería, por lo que estoy acostumbrado a que lo escrito signifique exactamente lo que pone, al uso certero de las palabras.

Por otro lado, mi bagaje literario de los clásicos es muy escaso (mucha ecuación y poco Homero o Lope de Vega), cosa que debería solucionar cuanto antes.

6. ¿Son los foros literarios el mejor medio de promoción de los autores noveles?
Los foros literarios en Internet sirven para muchas cosas, incluso para la promoción. Pero con la promoción en estos foros solamente, uno no se hace famoso entre el público general, solo entre los usuarios de estos foros. Es peligroso pensar que estos foros los lee todo el mundo, ya que generalmente suelen resultar muy cerrados, siempre somos los mismos los que hacemos/recibimos las promociones.

No hay que engañarse, la mejor promoción la hacen las editoriales, con montañas de libros en los grandes puntos de venta y en todas las librerías posibles. Si a eso le sumas la televisión…
Para los autores noveles, los foros literarios son un buen punto de partida, pero solo eso.

7. ¿Tienes alguna rutina diaria para escribir, o te dejas llevar?
Con un enano correteando por casa, mi vida es de todo menos rutinaria. Por lo que pretender establecer un momento concreto para sentarme a escribir es poco menos que imposible.

Eso sí, para ser escritor hay que escribir. Dicho así parece una bobada, pero alguna vez pretendemos ser escritores sin escribir nada, y eso solo le funciona a AR (la del negro). Por ello, tengo el firme propósito de escribir todos los días algo. El día que puedo, y sale, una página. Y si no, una frase. El día que no puedo, pues nada, a esperar. Pero pensar, pienso en personajes, diálogos, tramas, argumentos… todos los días.

8. La pastilla azul hace que seas un Best-Seller mundial. La pastilla roja hace que te estudien en la escuela cuando pasen los años. Tú eliges....
Me siento como Neo… ¿Quién no quiere pasar a la posteridad como un genio? La roja estaría bien. Pero… los reconocimientos póstumos me joden un huevo. ¡Quiero la azul!

Bueno, como me va el vicio de las pastis, me tomo las dos. Es más, me tomo dos botes de cada. Si este es mi sueño, ¿por qué no soñar con el máximo? Y además meto el gol de la victoria de España en la final del mundial. Por soñar que no sea.

9. Algo que puedas contar sobre tu último proyecto literario...
Uf… puedo contar que está en pañales. Estoy escribiendo una novela (de fantasía, claro), ambientada en la mitología nórdica, en la fuente de la que bebió Tolkien. Pero estoy huyendo de los tópicos de la fantasía: dragones, anillos, magos, elfos, enanos, bárbaros, bolas de fuego, torres de hechicería y todas esas cosas. Incluso del cliché de héroe del protagonista.

Aún es muy pronto para contar más. Aunque uno de los personajes lo he presentado ya en sociedad con notable éxito. Se llama Inás, y es la sibila de Mesilas. Con este relato quedé en sexta posición del TDL8 de la página Sedice.com (toma autobombo).

10. ¿Qué libro rescatarías a toda costa de tu biblioteca?
¿Sólo uno? Si tengo que elegir, sin tiempo para pensar, me llevaría El Señor de los Anillos. Si pudiera llevar más, cogería Víctimas de Koontz (eso en el caso de que estuviera en mi biblioteca; los libros son así de orgullosos, les prestas y ya no vuelven, y esta es la segunda vez que me lo hace, el muy orgulloso). Tal vez también La Espada de Fuego, de Javier Negrete.

11. ¿La última novela que has leído y recomendarías?
La última que he terminado ha sido Urnas de Jade, de David Prieto. Un buen escritor (y prolífico), para que luego venga alguno y diga que en este país no se escribe con calidad… La anterior a esta es una obra maestra, que también es recomendable al máximo: Canción de Hielo y Fuego, Choque de Reyes. Imprescindible.

12. ¿Con qué personaje literario te identificarías?
Me gustaría ser Conan, sin duda. O Sandokán. Aragorn, tal vez.

13. ¿Permitirías que adaptasen alguna de tus obras al cine?
Por supuesto. Eso tiene que suponer un buen pellizco. Pero yo exigiría a Peter Jackson como director, que quede claro.

14. Aparte de escribir, ¿practicas alguna otra disciplina artística?
¿El bricolaje cuenta como arte? Me temo que cantar, pintar o actuar no es lo mío. Con escribir y que se me entienda me conformo. Y si logro emocionar un poquitito muy pequeñito, soy el más feliz del mundo.

15. ¿Algún sueño que te falte por cumplir, y puedas confesar?
Huyendo de tópicos, de nuevo, tengo muchos sueños por cumplir, muchos. Algunos llegarán. Otros es probable que no. Pero todos son confesables.

Quisiera poder compartir lecturas y fantasías con mi hijo, cambiar impresiones y después ver una peli comiendo palomitas y tomando cocacola, hasta las tantas. Esto llegará pronto, soy afortunado.

Quisiera llegar a ser profe (opositando estoy), y terminar la novela que estoy escribiendo y que sea un éxito.

Quisiera tener una espada. Y un caballo.

Quisiera ser tan alto como la luna, ay, ay, como la luna…
(La lista sería interminable)

Muchas gracias por pensar en mí. Esta es la primera entrevista que me hacen, así que espero haber estado a la altura. ¡Nos leemos!


Gracias a ti, Esteban. Esperemos poder entrevistarte pronto, para que nos cuentes tus éxitos!!






miércoles, 13 de enero de 2010

Experiencias enriquecedoras

Cuando el camino hacia la publicación de "El secreto de los dioses olvidados" empezó a parecer despejado, se me plantearon algunas interrogantes personales. Llevaba mucho tiempo dejando a un lado relatos y proyectos de novelas. Escribiendo algunos párrafos, o varias páginas, sólo para archivarlos después. Esperando a que esa idea desdibujada volviera a tomar cuerpo. Ese sería el momento de retomar la historia y acabar de moldearla.

Por eso descubrir que era capaz de llevar una trama hasta el final, y hacerlo con la suficiente calidad como para recibir una oferta de contrato, me provocó una duda principal. ¿Había estado desperdiciando mi capacidad para escribir todo este tiempo? Todo el material llevaba ya meses o años alrededor mío, hibernando en cuadernos y cuartillas de papel. Sólo necesitaba que le prestara atención durante el tiempo suficiente. Y mientras lo comentaba con un amigo, me hizo una observación curiosa: "Ha tenido que pasar todo ese tiempo para que reunieras las experiencias necesarias para poder escribir la novela".

Las palabras no me acabaron de convencer. Si hay algo que se le supone a un escritor, es la capacidad para figurar. Para inventar. No es necesario haber viajado en una nave espacial para buscar las palabras que describan cómo será la sensación de ingravidez. Con un cúmulo de ideas para historias de ciencia-ficción o fantasía, las dudas sobre lo que estás plasmando se centran más en datos que hagan verosímil ese universo particular.

Sin embargo, meditando sobre el tema he acabado por darle la razón parcialmente a ese planteamiento. Puede ser una perogrullada que las experiencias vividas sí influyen en lo que escribes, pero también nos olvidamos que con el tiempo cada sentimiento vivido se enriquece. El abandono por parte del ser querido deja de ser un simple pinchazo en el corazón para convertirse en un chirriar de dientes o la sensación de ahogo al despertar y ver el hueco en la cama. Igual que la euforia por un éxito ya no es sólo la necesidad de salir a la calle y liberar la tensión gritando o corriendo, si no que puede consistir en unas simples lágrimas.

El tiempo quizá no hace mejores los momentos vividos, pero con los años acumulas experiencias de mayor intensidad. Y trabajar con ellas para proyectarlas en la escritura hace más poderoso el manuscrito. Un hecho que, como he dicho, parece obvio, pero que a mí se me había pasado inadvertido entre tantas horas sentado frente al papel en blanco. Y aún sin poder imaginar la sensación real de ciertos momentos, se tienen más recursos en el ámbito emocional. Una herramienta muy útil en la escritura de relatos con un gran componente de épica, en la que sensaciones y experiencias tienden a buscar el exceso para darle vida a un universo en el que buscas transmitir al lector emociones muy poderosas, más allá de la cotidianidad.

Así que ya sabéis. Salir a la calle. Vivid. Darle más piezas a vuestro vocabulario para que los manuscritos ganen en frescura.

lunes, 4 de enero de 2010

La maldición del "Arco-X"

Debo comenzar explicando a qué se debe el título del artículo, para que quede claro a qué me estoy refiriendo. La anécdota procede del mundo de los juegos de rol. En 1992, la traducción del manual del Dungeons and Dragons trajo a los aficionados un arma desconocida e insólita: el Arco-X. Durante meses nadie supo de qué se trataba, hasta que alguien logró desentrañar el misterio: se referían al Crossbow (Ballesta). Desde entonces, en el mundillo de quienes leímos fantasía y buceamos por la práctica del "role-playing" hablar del Arco-X es hacerlo de un fallo garrafal de edición.
En la primera ocasión en que conseguí publicar un relato, allá por 1997 (como finalista del certamen El Fungible), me enfrenté cara a cara con ese problema. El inicio del relato vio cómo mutaba una frase ("Ya no") por un "Yo no" que reducía su significado. Y ahí comenzó mi relación con el terror a que lo escrito por mí no fuese exactamente lo que apareciera después impreso.
Las veces en las que he conseguido publicar posteriormente me habían ido tranquilizando al respecto. Salvo por algunos cambios en la maquetación del texto, no tenía motivo para quejarme. Ya no me hacía falta ir con un bolígrafo en la mano para corregir las palabras mutadas.
Hasta que un comentario en Los secretos de los dioses olvidados me hizo estremecer de nuevo. Se trataba sobre todo de una crítica a los errores gramaticales que aparecían en la novela. De forma explícita, acusaba la inexistencia de un corrector de estilo. Y me la tomé con bastante tranquilidad hasta que un amigo me descubrió la posibilidad de una errata garrafal dentro del texto. Con toda la pena de mi corazón, llegué a casa y comprobé que era cierto. Se ha colado hasta la edición impresa una nota de la última corrección del manuscrito.
Lo que consideraba imposible ha ocurrido. La maldición de los "lapsus editoriales" me ha alcanzado. Por supuesto he realizado una revisión del texto y parece que los fallos se reducen a esa errata, pero la consecuencia inmediata es que tengo miedo por las críticas. Empiezo a temer que las reseñas de la novela se centren en cosas como ésta en lugar de en la narración en sí. Y me veo acumulando notas para corregir el texto en una futurible segunda edición.


sábado, 2 de enero de 2010

En el umbral del 2010

Ha llegado el Año Nuevo, y con él empiezan otros 365 días de planes y proyectos para llevar a buen fin. El listón se ha elevado mucho: publicar sigue siendo algo complicado de repetir. Pero este 2010 ha comenzado con una rareza (esa luna azul en el cielo), así que me lo tomaré como una señal de buen augurio. Además, aún espero a recibir las primeras críticas de "El secreto de los dioses olvidados"(aunque el primer comentario de una lectora amiga promete buenas expectativas). Y quiero comprobar que todas las alabanzas impresas en la contraportada tienen razón de ser...

La meta principal es seguir escribiendo relatos (mi ambiente natural) y acabar con mi nuevo proyecto: la primera novela de la que, espero, sea una interesante saga sobre un universo steampunk habitado por criaturas sobrenaturales. Aparte, y después de acabar en un par de recopilaciones el año pasado, me gustaría que éste fuera el momento de ganar uno de los concursos a los que me presente.

Viajar. Este año parece que podré al fin visitar un par de lugares que me interesaban desde hace tiempo. Londres (por un interés "profesional". Es una ciudad que me apetece utilizar como fondo para ambientar al menos una historia y no me veo capaz de hacerlo sin haber paseado un poquito por ella). Y Japón. Ese es un plan algo menos consistente, pero que está en mi lista de "visitas pendientes" desde hace mucho tiempo.

¿Otros proyectos? Me encantaría poder embarcarme en algo relacionado con el cómic. Hay unas cuantas historias almacenadas en los cuadernos que podrían cuadrar en el ámbito de la narración gráfica. Y me encantaría verlas "tomar vida" en imágenes. Es un sueño nada más, pero no quiero olvidarme de él para poder cumplirlo.

Hay algunos planes más en mente, por supuesto. Pero son Alto Secreto, y no puedo desvelarlos.... o tendría que mataros. :D