lunes, 4 de enero de 2016

Entresijos Editoriales: Patxi Larrabe (Neonauta Ediciones)

Después de ausentarse del blog durante el pasado año, la sección de entrevistas ha salido de su cápsula de hibernación para volver a entregaros pistas sobre el mundo editorial. Además, y con la intención de darle una vuelta de tuerca al concepto de esta sección, he conseguido convencer a algunos de los responsables al cargo de editoriales que están apostando por nuevos autores. A ver qué nos pueden contar sobre su experiencia y sobre sus esperanzas para el revuelto mundo de la publicación de libros. 

El primero de nuestros ilustres visitantes va a ser Neonauta Ediciones, a través de Patxi Larrabe. Para mí es un placer poder contar con ellos, ya que fue una gran alegría poder participar en Alambre de Letras con uno de mis relatos: Puro Artificio. Además de convertir ese libro en una pequeña joya de diseño y maquetación, llevan ya unos años intentando recuperar la tradición del bolsilibro. Ese formato de lectura tan apropiada para este mundo de prisas.


1. Defínete como lector/a. Gustos, influencias...
Soy un lector voraz. Suelo navegar entre libros de fantasía y ciencia-ficción, cómics de superhéroes y manuales de juegos de rol, aunque también me gusta la literatura clásica, sobre todo la picaresca (El Lazarillo de Tormes es uno de mis favoritos de siempre). Fritz Leiber es quizás mi mayor influencia, seguido por el Tolkien de El Hobbit e Isaac Asimov. Últimamente estoy investigando a Jack Vance. La verdad, hay tantos autores que quiero leer que espero vivir muchos años.

En cuanto a cómics, siempre he sido muy clásico, de la escuela de John Byrne, George Perez y Marv Wolfman. Recientemente he descubierto a Rick Remender y Grant Morrison, dos autores que me han impactado por su fuerza narrativa y su habilidad para crear historias emocionantes y con gancho. Y no puedo olvidar al Jack Kirby de su etapa más experimental de DC (El Cuarto Mundo, OMAC, Kamandi…). Es mi obsesión más reciente.


Por último, me gustaría reivindicar la importancia de los juegos de rol en la literatura. En mi caso concreto, fueron mi portal a la lectura de literatura adulta. Si no hubiera jugado al mítico juego de rol de El Señor de los Anillos de Joc Internacional, no habría leído El Hobbit y de ahí no habría saltado a la fantasía primero y la ciencia-ficción después. A día de hoy, considero la Dungeon Masters Guide de AD&D, obra maestra de Gary Gygax (uno de los inventores de los juegos de rol) como un libro fundamental para entender el desarrollo de la literatura fantástica, los juegos de rol y de ordenador actuales.

2. ¿Qué te empujó a crear un sello editorial?
El supuesto desmoronamiento de la industria del libro. Nos han vendido la idea de que la gente ya no lee y de que ya nadie hace nada nuevo y, lo siento mucho, pero me niego a creerlo. Lo que ha fallado ha sido el modelo de negocio de las grandes editoriales, pero el underground sigue ahí, siempre ha estado ahí y siempre estará ahí. Un sello editorial pequeño e independiente es costoso y, créeme, da más trabajo que beneficios, pero te permite crear exactamente lo que tú quieres y no hay mayor satisfacción que trabajar a gusto con un escritor o recibir felicitaciones por parte de los lectores cuando estás vendiendo tus libros en el stand de alguna feria.

Además, creo que hay mucho talento en España e, históricamente, hemos sido un país que se ha burlado o ha rechazado a sus propios artistas. Fíjate en el cine, la música, las bellas artes… ¿No es un poco triste que artistas y creativos españoles triunfen en todo el mundo menos, precisamente, en España? Es hora de demostrarnos a nosotros mismos que somos algo más que ajos y panderetas…


3. Autopublicación, piratería... ¿No es un momento arriesgado para embarcarse en esta aventura?
Sí y no. Sí porque, como te comentaba antes, yo ni siquiera lo considero como un negocio. Yo tengo mi day job, como dicen los americanos, por lo que tengo asegurados los garbanzos para mí y para mi familia. La editorial es algo más personal, más artesano. 2015 ha sido un año muy duro para nosotros, con muchos baches y mucha frustración, pero tenemos ganas de seguir dando caña en 2016. Es difícil compaginar un trabajo, un hobby y una familia sin dejar de lado ninguna de las tres. Yo solo se lo recomiendo a los valientes…

En NeoNauta Ediciones no hemos necesitado de financiación externa para sacar adelante el proyecto (vamos, que la pasta la hemos sacado de nuestros bolsillos). De todas formas, es interesante observar cómo, en esta era de la piratería y de la cultura gratis, están cobrando cada vez más fuerza propuestas como el mecenazgo, los crowdfundings, etc. Y es que, si lo analizamos históricamente, siempre ha sido así. Es raro el artista que, por sus propios medios y sin ningún apoyo económico de nadie, haya podido triunfar.

Cada día estoy más convencido que esa concepción de la cultura como bien de consumo es la que precisamente ha acabado con toda la industria cultural.


4. También se dice que hay demasiados escritores y demasiados pocos lectores...
Volvemos un poco a la idea de antes. Siempre ha habido muchos artistas. Cualquiera que investigue un poco las corrientes de hace 50, 100, 200 o más años, descubrirá que no solo escribían los que pasaron a la historia. Es más, posiblemente vendían más ejemplares los que no pasaron a la historia que los que sí (al que le interese este tema, le recomiendo que indague en la literatura picaresca en Europa de los siglos XVI-XVII. Se va a llevar más de una sorpresa). 

Puede que hoy en día se lea menos que antes, pero creo también que la calidad lectora ha aumentado. Leemos pocos, pero los que leemos somos muy sibaritas, y no nos conformamos con esos tochos debidamente serializados e industrializados que nos venden las grandes editoriales en los supermercados, junto a las lechugas y los lácteos. Queremos relatos diferentes, arriesgados, que sean buenos o malos, pero que no nos dejen indiferentes. Queremos y necesitamos buenas historias.

5. Lectores, escritores, editores... ¿Cuánta influencia tienen a la hora de «poner de moda» cierto género?
No creo que ahora mismo importen mucho las modas o los géneros. Quizás a las editoriales de supermercado sí, pero en todo caso son modas que apenas duran unos meses. Una de las ventajas de esta enorme crisis cultural es que nunca antes hemos vivido un periodo de mayor libertad creativa. Lo que nos toca es aprovecharlo como es debido y huir de esas estrategias que llevó a la industria editorial al hundimiento.

6. Para publicar en tu sello... ¿Cuentos o novela?
De momento, hemos sido muy estrictos con la longitud de los bolsilibros. Al ser un formato reducido, no se podía pasar de las 25.000 palabras (un relato largo o novela corta, lo que prefieras). Pero en breve daremos el salto a algún nuevo tipo de formato. Hay que huir del estancamiento. Hay que evolucionar y experimentar.


7. ¿Qué buscas en un manuscrito a la hora de valorarlo?
Puede parecer extraño, pero en NeoNauta, en la mayoría de los casos, hemos sido nosotros los que hemos contactado con los escritores pidiendo que nos escribieran una historia. Puede que esté mal que lo diga, pero no solemos tener muy en cuenta los manuscritos que nos envían. Si he leído a un autor y me gusta, como es el caso de Luis Guillermo del Corral o de Miguel Ángel Naharro, intento contactar con él y le ofrezco la posibilidad de publicar para nosotros. 

8. ¿Cuál es el principal error que cometen los autores al enviar manuscritos?
Esta es muy fácil: decirte que es la novela definitiva que va a venderse como churros y hacer rico a todo el mundo. En serio, hay gente que es así. O enviarte un libro ya acabado con las condiciones de publicación y sin posibilidad de revisión. También hay gente así.

El papel del editor ha sido muy castigado por las malas prácticas que se han llevado a cabo por parte de las grandes editoriales y por editoriales “trampa” que solo buscan un beneficio (esas que cobran al escritor por publicar su libro… ¡vergonzoso!). El editor no debería ser un tirano ni un mero publicador. Debería acompañar al escritor en el proceso creativo, guiándolo y mimándolo.

9. ¿Cuál es el libro del que estás más satisfecho?
Alambre de Letras, sin duda alguna. La Primera Guerra Mundial es una de mis pequeñas obsesiones, y sacar adelante este proyecto ha sido una de mis mayores satisfacciones en la vida. Creo que es un buen libro, en todos los aspectos. Es en el que más hemos cuidado la calidad del papel, la maquetación, las ilustraciones, los textos… y todos esos pequeños detalles se notan. También es el libro por el que más felicitaciones hemos recibido, y eso es una sensación indescriptible. Ha costado mucha sangre, sudor y lágrimas, pero ha merecido la pena.


10. ¿Un/a autor/a que te haya hecho ilusión publicar, o con quien te gustaría trabajar?
Esta es una pregunta trampa… jejeje… Algo así como, ¿cuál es tu hijo favorito? 

Fuera bromas, me ha gustado mucho trabajar con Luis Guillermo del Corral en nuestro último bolsilibro, Kaijin. He tenido el placer de conocer personalmente a Luis y es una persona encantadora. Le dimos unas cuantas vueltas al texto inicial y ha terminado siendo un relato muy bueno, muy original. Espero poder seguir publicando libros suyos.

¿Con quién me gustaría trabajar? Como te he dicho antes, hay un montón de gente interesante por aquí y tengo unas cuantas personas fichadas con las que me gustaría poder trabajar, pero prefiero mantenerlo en privado de momento.

11. Un proyecto del que puedas hablar...
Tras un año difícil lleno de complicaciones, hemos vuelto con fuerza y ya estamos trabajando en el siguiente bolsilibro: Hundara la Rebelde de Miguel Ángel Naharro. Va a ser una historia de fantasía, de espada y brujería, pero basado en la mitología celta, y con una protagonista de armas tomar. En estos momentos estamos en la corrección previa a la maquetación, y la portada (también de Fernando Vicente, nuestro portadista habitual) está terminada. Tenemos algún título más en la recamara y, a largo plazo, Alambre de Letras 2.


12. Recomiéndanos una lectura (que no sea de tu editorial).
¡Hay tantas! Voy a romper una lanza a favor de una colección que me parece sensacional: los mini-libros de Austral Básicos. Grandes clásicos a un precio ridículo. Shakespeare, R.L. Stevenson, Wilde, Quevedo, Torrente Ballester, Bécquer, Cervantes… Un buen ejemplo de buenas prácticas editoriales. 

1 comentario:

  1. Genial por las editoriales españolas que siguen apostando por nosotros. Larga vida y prosperidad. Me gusta el formato de novela corta, es un soplo de aire fresco. Saludos.

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